El director del Centro Regional Campana de la Universidad de Luján reflexiona sobre el rol de las universidades en nuestra ciudad y aporta su visión estratégica en relación a la oferta educativa asociada con las necesidades de nuestra región.

Cuando llegué a Campana, todavía se paseaba Calixto saludando gente desde el Falcon… Era un clásico de todos los domingos por la mañana que él recorriese la ciudad” señala Hernán Pirsch (65), Lic. en Comercio Internacional y Director del Centro Regional Campana de la Universidad Nacional de Luján.

¿Qué estás viendo de aquella ciudad a ésta?

Pasaron más de 30 años. Son dos mundos distintos. Sólo hay que pensar que la Ruta 9 era de dos carriles nada más, ni hablar de la Ruta 6 que la hicieron autopista mucho tiempo después, con todo lo que eso implica en términos de logística. Las empresas importantes eran más o menos las mismas que ahora… por ahí se sumó Honda, por citar un ejemplo. También es cierto que en el centro hubo un florecimiento de la propiedad horizontal; y también un crecimiento del otro lado de la Ruta 9, en el vértice de la rotonda de Mc Donald’s hacia el barrio Siderca, VITRAMU, Santa Florentina, y Héroes de Malvinas. Ahora ese eje parece haberse trasladado a la avenida Alfonsín. Pero también hubo un cambio en lo profundo. La gestión de Varela fue un parte aguas, fue como más visible cómo Jorge empezó a involucrarse con los barrios. Generó mucho acompañamiento de la gente, algo que no estuvo tan marcado en la gestión de Stella; y que ahora también caracteriza a la gestión de Sebastián (Abella). Y creo que por esta misma razón es que sigue ganando.

Se entiende que Varela aportó infraestructura estratégica que permite ese desarrollo posterior y que seguimos viendo todavía hoy.

No soy parte de esta gestión, por lo tanto opino como vecino. Participo de la universidad, y desde ese lugar puedo decir que cuando hemos necesitado cosas tanto Jorge como Sebastián nos han dado una mano y nosotros a su vez hemos intentado responder cada vez que nos necesitaron… Tengo la suerte de haber trabajado en una empresa privada durante muchísimos años, y por las características de ese trabajo, recorrer bastante la provincia. Y desde ese lugar, puedo hacer comparaciones con otras ciudades en términos de crecimiento, y Campana ha sido y es muy dinámica, y bastante ordenada. Si yo comparo a Campana con respecto a Pilar, ciudad donde nací, puedo decir que su crecimiento fue caótico.

¿En qué sentido?

Pilar creció en el kilómetro 40, los shoppings… no creció la ciudad en sí. Pilar sigue siendo igual de problemática para circular como hace 45 años atrás. No hubo grandes desarrollos dentro de la ciudad.

Y con el doble de gente, calculo…

Con el triple. El casco urbano de Pilar sigue siendo el mismo que hace 45 años atrás. El único hito fue la calle peatonal, nada más, que además no sirvió para nada. A eso hay que sumarle que los vecinos históricos de Pilar ya no están en Pilar. En cambio, cuando yo vine a Campana me llamó la atención la cantidad de barrios al otro lado de la Panamericana. Por una cuestión de militancia, todos saben que son radical, empecé a conocer ese otro Campana al cual era totalmente ajeno. Es decir, empecé a involucrarme en la ciudad en la que vivía y vivo, que me adoptó y yo adopté para criar a mi familia. Por lo tanto, en cada campaña política, con mis correligionarios recorríamos los barrios y fui viendo cambios. Los sigue habiendo y algunos son notables.

Bastante más que pavimento…

Exacto. Por ejemplo, no en todos lados hay Centros de Atención Primaria de la Salud como los de acá… A ver: yo elegí vivir acá (por ahí no todos tienen la suerte de poder elegir) porque me gusta su dinámica. Habrá gestiones más o menos felices, pero ves un hilo conductor.

Y desde ese lugar, ¿Qué rol cumplen las universidades? Hablo de la UNLU y la UTN que, además, tienen una silla en la Agencia de Desarrollo.

Las universidades tienen una razón de ser. Y particularmente, tanto la UTN como la UNLU, tienen como objetivo acercarse a la gente. Que los vecinos no tuviesen que viajar y dejar su lugar de pertenencia para acceder a estudios superiores. Por ejemplo, cuando la UNLU se instaló en Campana, también lo hizo en Chivilcoy, San Fernando, San Miguel, y Luján propiamente dicho. Hay que imaginar un radio de 50 kilómetros a la redonda, cuya avanzada profunda en la provincia es Chivilcoy. Concretamente, se pensó que los obreros pudiesen continuar sus estudios y capacitarse en materias blandas; mientras que la UTN tiene ese rol en el campo de las duras… en el caso de la UTN va de suyo con la cantidad de empresas metalmecánicas que tenemos en toda esta zona.  Después, a la UNLU de Campana venían alumnos de todo el corredor de la Ruta 9, por lo tanto esta delegación tenía razón de ser; como lo tenía Chivilcoy en relación a su zona agrícola ganadera de influencia: la UNLU de Chivilcoy fue la primera universidad en incluir la carrera de Industria Alimenticia en su oferta educativa. Dicho esto, pensemos entonces que la oferta de las universidades responden a lo que su entorno demanda o va a necesitar.

Y esa oferta inicial o fundacional, ¿sigue teniendo vigencia hoy?

Es la pregunta… y asumo que sí. Por supuesto que la realidad es dinámica y quizá sea tiempo de aggiornarse un poco. Cuando hoy escuchás hablar de Inteligencia Artificial por todos lados, es natural repensarse y generar carreras asociadas a ese tipo de conocimiento. No es tan sencillo. Podés diseñar y tener las carreras, pero no el presupuesto para ponerlas en marcha. Y no estoy hablando de la particular gestión de los recursos que estamos atravesando hoy desde el gobierno nacional. No es el punto. Hablo de determinados requisitos para poder traer una carrera, incluyendo el presupuestario. Dicho esto, podemos decir que las 5 licenciaturas que se pueden cursar en la Delegación Campana de la UNLU están en relación a su entorno: Información Ambiental, no hace falta defenderla. Tenés también Trabajo Social: nadie puede negar que para poder gestionar necesitás conocer el territorio. Tenés la carrera de Contador Público y Administración de Empresas, precisamente lo que se busca en la zona. Y tenés Comercio Exterior, que tiene relación directa con nuestros puertos sobre el río Paraná. Es decir, hay una relación directa entre la oferta educativa y la salida laboral del entorno (otro tanto sucede con la Regional Delta de la UTN).

¿Y qué carrera sería necesario traer a Campana?

Hace tiempo que pensamos en traer Enfermería. Hoy tenemos escuelas de enfermería, gente que se termina formando en la práctica. Lo que pensamos es ampliar la base de sustentación sobre la que la Salud trabaja, formando nuevos profesionales. Lo tenemos definido, porque es una demanda muy explícita tanto en Campana, como en Zárate y Escobar. Es algo que lo tenemos pendiente pero, bueno, todo pasa por el presupuesto. Y en épocas como las actuales en las que los recursos siempre son escasos… se complica. Si por mi fuese, traería 10 carreras más. Porque también es una realidad que nuestras instalaciones tienen una franja horaria, puntualmente por la mañana, en la cual está prácticamente vacía, porque la gran mayoría de nuestros estudiantes además tienen un trabajo. Entonces el 80 u 85% de las carreras de dictan después de las 17 y hasta las 23… Por la mañana tenemos disponibilidad. De hecho, por la mañana prestamos aulas al Colegio del Norte, que es vecino nuestro, y algunos de sus talleres los dictan aquí.

Es conocido el caso de una egresada de la UNLU Campana que hoy ocupa un altísimo puesto en Toyota.

Tal cual. Y en la marca deportiva Puma, también tenemos un caso similar. Tenemos muchísimos egresados de Campana trabajando en empresas de primera línea. Va a sonar filo peronista, pero las verdades hay que decirlas no importa quien las haya enunciado: La famosa movilidad ascendente que caracteriza a nuestra clase media pasa por la Educación. Siempre. Y cuanto más gente acceda a la Educación, las sociedades y los países mejoran. Casualmente estos días estoy armando unos talleres para ingresantes, básicamente de comprensión de textos, para que los chicos arranquen sus cursadas con un ritmo universitario. Como sea, estaba trabajando sobre un artículo publicado en la revista Anfibia que habla sobre la primera generación de universitarios en una familia. Por ahí más de uno piensa que eso pasó hace rato y no es tan así, porque muchos quedan en el intento. Aquí entran unos 800 alumnos por año. Por diferentes razones, un 40% va a terminar desertando.

Volviendo al tema de la capacidad instalada ociosa de la UNLU en Campana, ¿Se puede hacer algo en ese sentido?

Esta es una universidad pública, nacional y gratuita. Por tanto el financiamiento tiene que venir del Estado, no puede venir de los particulares. Y hoy no es prioridad para el Estado que las universidades amplíen su oferta educativa. Tampoco creo que pase por desafectar carreras para financiar otras.

Pero en el caso de Enfermería, tenemos al menos tres municipios interesados en que la carrera se arme ¿No podría venir el financiamiento por ahí?

Podría, pero hoy técnicamente no existe la herramienta jurídica o jurisdiccional para que eso suceda. Nosotros somos nacionales. Lo máximo que pueden hacer por nosotros, como se hizo durante la gestión de Jorge Varela, es donarnos el terreno o, por caso, firmar un convenio para acceder a los laboratorios del hospital para realizar prácticas. Pero no hay forma que un municipio se haga cargo de los sueldos de los profesores.

Como vecino, que además es un militante radical, y sentado en la silla que tenés en la Agencia de Desarrollo ¿Hacia dónde ves que debería fluir Campana?

No sé si importa tanto mi opinión personal, pero sí puedo mencionar algunas cosas que estamos abordando en la Agencia con las cuales coincido y pueden ser importantes a futuro. Por ejemplo, lo que vemos es que está faltando es el desarrollo de tecnología. La oferta educativa tiene que venir por ahí… de la mano de la creación de un parque tecnológico, que ofrezca servicios a las industrias locales e incluso exportar conocimiento… Campana tiene toda la potencialidad y peso específico para hacerlo. Sin ir mas lejos, pensemos que Campana es una de las pocas ciudades del interior que cuenta con dos universidades nacionales.   

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