Al igual que en abril pasado, más de 100 misiles balísticos ingresaron en el espacio aéreo de Israel este martes, cuando recién se había escondido el sol en Oriente Medio.

Lanzados desde Irán, tardaron sólo 12 minutos en cubrir una distancia de unos 2000 kilómetros. Su objetivo ya no sólo se concentró en la capital Tel Aviv, sino a otras localidades del centro y sur de Israel. Si bien algunos misiles lograron evadir el “domo de hierro”, hasta el momento no se habían reportaron bajas entre la población.
Según informaron diferentes agencias de prensa occidentales, el ataque fue reconocido por la Guardia Revolucionaria de Irán como respuesta a las diferentes ofensivas israelíes perpetradas las últimas semanas, que incluyeron los asesinatos del líder de Hezbolah, Hasán Nsarrallah; el de Hamás, Ismail Haniya, y el general iraní Nilforoushan, entre otras víctimas.