Ubicado a pocas cuadras del ingreso a Belén de Escobar, es el ganador de la categoría “Bodegones” de los Premios Cucinare 2023.
El teléfono del bodegón “Lo de Lucas” arde. No para de sonar y luego de recibir las felicitaciones del caso, los dueños aclaran que hace tiempo ya que no toman reservas…
El banner publicado por Cucinare para difundir el hito gastronómico.
Lo cierto es que hace un mes atrás, habíamos publicado como “dato” de interés que el popular restaurante que se encuentra a pocas cuadras del ingreso a Belén de Escobar, había sido incluido en el “TOP 15” de bodegones del AMBA, participando así de los Premios Cucinare 2023, cuyo ganador surge del voto del público.
Dicen que “Sala de Redacción” trae suerte (de hecho, luego de la publicación de la crítica de Silvina Torviso sobre “Nuestra parte de la noche”, la novela de Mariana Enriquez fue incluida por la revista Time en el listado las 100 mejores novelas publicadas en EE.UU. durante el 2023). Bromas aparte, la cuestión es que ayer lunes se confirmó que “Lo de Lucas” será el rey de los bodegones del AMBA durante los próximos 12 meses y lo tenemos acá nomás.
Su carta se caracteriza por las generosas porciones para compartir, y una variadísima carta de postres. De hecho, su slogan versa: “En lo de Lucas se come sin culpa“. El popular reducto cuenta, además, con una extensa carta de vinos que incluye etiquetas infalibles, tales como Rutini, Catena Zapata o Luigi Bosca, y otras más modestas pero cumplidoras, como el clásico Don Valentín Lacrado o el recién llegado Otro Loco Más. Así que además de comer, en “Lo de Lucas” se bebe sin culpa también, por lo que no está de más considerar contar con un “conductor designado” para la pantagruélica ocasión.
Uno de los platos más festejados es la tortilla de papas babé, además de las interminables milanesas napolitanas o la versión con jamón crudo y rúcula. La carne al horno con milhojas de papa tampoco se queda atrás…. Los precios son accesibles y sus dueños aseguran que la materia prima de todo lo que se sirve es siempre de primera calidad.
Como sea, y más allá de su inclusión en el competitivo olimpo bodeguil porteño a manos de Cucinare, lo cierto es que la gente hace cola para poder sentarse a comer en familia o con amigos. Entonces: paciencia y… ¡Bon apettit, mon amis!