Por Gonzalo Viscardi✍
A 72 horas del bochornoso episodio financiero asociado a la “meme coin” o criptomoneda “$LIBRA”, todavía es temprano para evaluar los daños políticos y financieros provocados en la Argentina.
Pero aun así, es evidente que el Presidente Milei se acaba de pegar un tiro en el pie y ha quedado, una vez más, expuesta su discutible capacidad para estar al mando de la Casa Rosada.
Lo cierto es que, siempre, el lanzamiento de una “meme coin” está atada a uno o más influencers que hablan bien o directamente la recomiendan.
Visto de ese lugar, es imposible no asociar el “twitter” oficial de Milei apoyando a la criptomoneda mencionada que, además, fue lanzada minutos antes -en clara coordinación- de la publicación del presidente de los argentinos. Como agravante, esta publicación incluía un link directo para operar y comprar $LIBRA.
Consumada la millonaria estafa -todo duró menos de 5 horas- Milei borró su publicación original y la suplantó por otra en la que asegura desconocer “los pormenores del proyecto”.
Sin embargo, si no estaba al tanto como dice, es más que evidente que la banda presidencial le queda grande. Y si no, directamente está mintiendo de manera descarada e infantil.
El episodio (la Justicia determinará si hubo delito) seguramente lo ha debilitado políticamente a las puertas de dos trascendentes negociaciones vinculadas con las elecciones de octubre.
Hasta el viernes, el PRO se encontraba en plena diáspora y, de sobrevivir, sólo aspiraba a ser furgón de cola de La Libertad Avanza. Ahora veremos cuánto vale el hasta hace horas devaluado apoyo de Macri (en términos políticos y de habilitación de negocios).
La otra negociación está vinculada al FMI. Ya estaba en duda si el organismo financiero liberaría los dólares necesarios para sostener el precio al menos hasta octubre. ¿Cuánto cotiza en Whashington la credibilidad del gobierno de Milei luego del “criptogate”?