El campanense y actual 9 del Racing Club de Avellaneda, Adrián “Maravilla” Martínez (31), ofreció una charla motivacional a más de 80 jóvenes privados de su libertad en el complejo penitenciario de la Ruta 6. Contó su historia de vida, la que incluye su paso por la cárcel como detenido. “Siempre llevando el evangelio de Dios que cambia y transforma vidas para el que cree…”, comentó al respecto en sus redes sociales.
En 2014, el hermano de Adrián Martínez fue baleado y él fue arrestado -por error- tras haber sido acusado de quemar y robar la casa del agresor. Tras seis meses en prisión, la inocencia de Maravilla fue confirmada y al salir de la cárcel volvió a Las Acacias. “Vi cómo se mataba gente. Porque ahí se matan como nada, se cagan a puñaladas. Vi morir a uno: lo agarraron de las patas y se lo llevaron. Es así. Yo estuve a punto de ser apuñalado, no llegaron por poco”, le reveló a Olé meses atrás.
Según relató, previo al fútbol y a su breve espacio de detención había trabajado como recolector de basura y albañil. Recién llegó de forma regular al fútbol con 22 años luego de recobrar la libertad. Hasta entonces, sólo había jugado como cadete en la liga campanense para Las Acacias; y tuvo un breve paso por Villa Dalmine a los 17.

Martínez se refirió a su infancia, a su familia, su paso por la cárcel y de su experiencia en el fútbol: “Como me pasó a mí que pude recuperar mis sueños y hacerlos realidad, ustedes también pueden”, dijo y agregó: “Para eso es necesario tener perseverancia y espíritu de sacrificio, y saber aprovechar las herramientas que pueden adquirir durante el tiempo de encierro, ya sea aprender un oficio, como terminar los estudios secundarios, terciarios y por qué no universitarios”.
TRAYECTORIA
“Nada fue fácil” dijo Martínez quien recién a los 22 se metió de lleno en el fútbol cuando aprovechó una chance en Defensores Unidos de Zárate donde lo ficharon sin goce de sueldo y anotó 21 goles en 2 temporadas.
Luego continuó su camino por el ascenso y pasó a Atlanta donde anotó 15 goles, 2 de ellos a Belgrano de Córdoba y a River Plate durante la Copa Argentina. Más adelante llegó el momento de emigrar al Paraguay, donde se destacó en Sol de América, Libertad y Cerro Porteño. Fue campeón paraguayo y participó de la Copa Libertadores.
Después estuvo un año en el Coritiba de Brasil y una vez que regresó a la Argentina para jugar en Instituto de Córdoba, donde marcó 18 goles y dio 9 asistencias en 41 partidos. Luego de quedar libre, fue fichado por el Racing Club de Avellaneda donde actualmente es su principal artillero, acumulando 20 tantos en 24 partidos.
La charla contó con el apoyo del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires. Sobre el cierre, la directora de la Región VIII del Patronato de Liberados, Cecilia Moyano, expresó: “En este día gris el testimonio de Adrián hizo salir el sol para todos“.